Gobierno extiende los precios máximos hasta el 31 de marzo

Como parte del plan para luchar contra la inflación, el Gobierno extenderá el programa de Precios Máximos hasta 31 de marzo, con la intención de morigerar la suba de los precios sobre todo en los alimentos, que sobre el cierre del año pasado se aceleraron. Si bien el programa rige exclusivamente para los productos de las góndolas de supermercados y comercios minoristas, y no incluye a los productos frescos ni a las materias primas, fuentes oficiales explicaron a ámbito que se está “haciendo un análisis sobre toda la cadena alimenticia”.
La intención de la Casa Rosada es que los precios internacionales de las materias primas, que desde el año pasado se aceleraron debido a la pandemia del coronavirus, no se trasladen a los insumos, y a la mesa de los argentinos.En ese sentido, el análisis que está sobre los escritorios de los despachos oficiales, es que en 2020 el precio de todos los alimentos que están en las góndolas de los supermercados subió 23%, mientras que el aumento en los productos frescos fue bastante por encima de la inflación que cerró el año pasado con un nivel general del 36,1%.A partir de esa evaluación, en el Gobierno consideran que se hace necesario continuar con el congelamiento de precios finales, con algunas revisiones y monitoreos, cuidando particularmente los productos más sensibles y de primera necesidad.

Es por eso que en esta nueva prórroga seguirá vigente la sintonía fina sobre la evolución de los precios de los alimentos. El año pasado a medida que la evolución de la pandemia le permitió al Gobierno morigerar el aislamiento, y la cartera de productos incluidos en Precios Máximos se concentró en los productos esenciales.

Al respecto, fuentes oficiales indicaron que continuará “el tratamiento diferenciado de algunos productos que no son de primera necesidad o que se comercializan en algunas versiones premium, donde avanzamos en su exclusión del listado de precios máximos”.

Con ese lineamiento, el equipo económico está evaluando la situación de algunos productos que no inciden en el consumo diario o que son producidos por muchas pymes para en el corto plazo excluirlos del listado.

 

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