En Argentina, el 91% de los chicos van a clases presenciales, pero hay un millón que todavía no regresaron
UNICEF presentó su informe “Impacto de la pandemia en la educación de niños, niñas y adolescentes” en el que muestra que el 91% de los chicos tuvieron clases presenciales, pero hay un millón que todavía no regresaron. Esta es la cuarta encuesta de la organización y fue realizada entre el 24 abril y 12 mayo de este año.
El estudio, además, señala que en la mayoría de las jurisdicciones se implementaron modelos mixtos que combinan presencialidad y clases remotas, otras priorizaron la presencialidad completa, mediante jornadas reducidas y organización de las aulas en burbujas, y un tercer grupo solo tuvo escolaridad remota.
Por su parte, el relevamiento comprobó que la presencialidad escolar impacto positivamente entre los estudiantes: nueve de cada diez familias destacaron que el regreso a las aulas había mejorado su estado de ánimo. También, los adolescentes afirmaron que se sintieron contentos al volver a la escuela y reencontrarse con sus compañeros. Esto produjo una mayor motivación con el estudio y la realización de tareas.
El informe refleja que, este año, en ocho de cada diez hogares donde hubo estudiantes que abandonaron la escuela, reportaron que la retomaron. Sin embargo, en el 19% restante, los chicos no volvieron a clases, con fuertes disparidades entre regiones: en el noroeste y AMBA, estos valores ascienden a 29% y 26%, respectivamente.
Finalmente, la brecha tecnológica es uno de los desafíos más importantes que hay que resolver en el actual contexto de escolaridad. Si bien se identifica una leve mejora respecto del 2020, la situación aún es compleja porque uno de cada dos hogares no cuenta con una computadora para uso escolar en la casa.
En relación al equipamiento y la conectividad muestra que, en 2021, el 26% de los hogares tiene una situación desfavorable: no cuentan con dispositivos para trabajo escolar o internet domiciliario. Adicionalmente, los datos muestran que uno de cada cuatro hogares, donde los chicos cursan exclusivamente a distancia, carecen de recursos TIC.